Rock, cine, comics, ciencia ficción, cervezologia y sueños rotos.
Monday, January 15, 2007
15-01-1919
La Revolución no será televisada!
La pena capital, la vergüenza mayor del ultrarreaccionario código alemán, debería ser eliminada de inmediato. ¿Por qué vacila este gobierno de obreros y soldados? Hace doscientos años el noble Beccaria denunció la ignominia de la pena capital. ¿No existe esta ignominia para vosotros, Ledebour, Barth, Däumig? ¿No tenéis tiempo, tenéis mil problemas, mil dificultades, mil tareas os aguardan? Cierto. Pero controlad, reloj en mano, el tiempo que se necesita para decir: “¡Queda abolida la pena de muerte!” ¿Diréis que para resolver este problema se requieren largas deliberaciones y votaciones? ¿Os perderíais así en la maraña de las complicaciones formales, los problemas de jurisdicción, la burocracia departamental?
(Rosa Luxemburg)
5 comments:
Anonymous
said...
La frase de la revolución no será televisada me trae a la cabeza esa idea de que todos los últimos movimientos de protesta fracasaron porque antes de darse cuenta ya están institucionalizados
Respecto al texto, pues que decir aparte de un 100% de acuerdo. Intentar prolongar la pena capital bajo justificaciones futiles es todo un atentado a la razón
A mis primerizos 14 años esta fue una de mis teóricas de cabecera: Rosa Luxemburgo y su agradecido sentido común en la izquierda, ha abierto sendas muy interesantes.
Una pena que ese sentido comun de izquierda de los espartaquistas quedara enterrado en las calles alemanas por aquella basura ideologica del nazismo.
Un acierto recuperar estos apuntes de Rosa Luxemburgo en estos tiempos en los que conceptos aparentemente tan opuestos como democracia y horca parecen ir cogidos de la mano.
La Revolución no será televisada es una canción de Gil scott heron... Me animé con este post no solo por el tema Saddam, sino por el aniversario de la muerte de Rosa Luxemburg. En contra de lo que se piensa, esta ideóloga no creía que fuera el momento de una insurrección y se opuso a ella, pero como adalid de la izquierda alemana acabó sustentándola. Eso fue su sentencia de muerte. Sin duda Beccaria, nombrado por Luxemburg, es una referencia ineludible. Él parió el derecho penal, intentando sustituir venganza por justicia.
Mutando desde 1981. Rock, Pop, cine, comics, literatura, filosofía, conspiranoias, cyberpunk, y tecnomisticismo. Explorador de sensaciones, romántico y cínico, especialista en venenos rápidos, pluma mercenaria, sindicalista, anarco-socialista, utopista
5 comments:
La frase de la revolución no será televisada me trae a la cabeza esa idea de que todos los últimos movimientos de protesta fracasaron porque antes de darse cuenta ya están institucionalizados
Respecto al texto, pues que decir aparte de un 100% de acuerdo. Intentar prolongar la pena capital bajo justificaciones futiles es todo un atentado a la razón
Un saludo!
A mis primerizos 14 años esta fue una de mis teóricas de cabecera: Rosa Luxemburgo y su agradecido sentido común en la izquierda, ha abierto sendas muy interesantes.
Una pena que ese sentido comun de izquierda de los espartaquistas quedara enterrado en las calles alemanas por aquella basura ideologica del nazismo.
Un acierto recuperar estos apuntes de Rosa Luxemburgo en estos tiempos en los que conceptos aparentemente tan opuestos como democracia y horca parecen ir cogidos de la mano.
soy uno de los consideran la pena de muerte una verguenza impropia de cualquier país que se tenga por 'civilizado'
es curioso que en los States no se lo planteen, ni siquiera el partido que está en la oposición cada vez
va el abrazo
La Revolución no será televisada es una canción de Gil scott heron...
Me animé con este post no solo por el tema Saddam, sino por el aniversario de la muerte de Rosa Luxemburg. En contra de lo que se piensa, esta ideóloga no creía que fuera el momento de una insurrección y se opuso a ella, pero como adalid de la izquierda alemana acabó sustentándola. Eso fue su sentencia de muerte.
Sin duda Beccaria, nombrado por Luxemburg, es una referencia ineludible. Él parió el derecho penal, intentando sustituir venganza por justicia.
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