Adiós Robert. No eras mi director favorito, pero si perpetraste una de mis películas de cabecera.
Siempre intentaste que los protagonistas fueran los actores antes que tú mismo. Que encuentres un buen casting al otro lado. This is the long goodbye.
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4 comments:
Poco directores me han irritado tanto como Altman.
Reconozco su honestidad. Nunca se vendió, ni siquiera en sus horas más bajas. Siempre fue fiel a su filosofía.
Prefiero su primera época: "Tres mujeres", "Un largo adiós", "MASH"... Su última etapa prefiero pasarla por alto, por superficial y vacua.
A pedar de haber firmado alguno de los peores bodrios que he visto en una sala de cine ("Pret-a-Porter", "El dortor T y sus mujeres"... o en vídeo: "Popeye", el remake de "Los amantes de la noche", que horror de supuesto homenaje, Dios.), a pesar de ello, se le echará de menos. Entre otras cosas por la maravillosa "Un largo adiós" que cita en su posteo, Mycroft.
juntos la vimos (aunque no revueltos)
Sefuro que encuentra un casting perfecto. Es una lástima que no haya dejado ningún discípulo reseñable, sino sólo cineastas que calcan sus tics sin entenderlos del todo.
¿Díscipulos altmanianos? Parece que PT Anderson haga cosas muy bellas con las aportaciones corales del maestro (boogie nights, magnolia) pero en realidad no es Altman. ¿Por qué? No escucha jazz y se nota.
Altman si, y se nota también. Quiero decir, que no lo escucha, que lo oye el jazz. Y claro, oyendo esa música y siendo un genio lo tienes todo a tu favor.
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