He aquí la historia de tu vida, pero reducida a dos horas. El momento en que viniste al mundo, en que tu madre dio a luz en el asiento trasero de un taxi, ahora es tu secuencia inicial. La pérdida de tu virginidad es el clímax de tu primer acto. La adicción a los calmantes es la progresión dramática de tu segundo acto. Los resultados de tu biopsia son la revelación de tu tercer acto. Lauren Bacall estaría perfecta como tu abuela. William H. Macy como tu padre. Dirigidos por Peter Jackson o por Roman Polanski.
Se trata de tu vida, pero procesada. Embutida en el molde de un buen guión. Interpretada de acuerdo con el modelo de un éxito de taquilla. No es extraño que hayas empezado a ver cada día en términos de un nuevo episodio de la trama. la música se convierte en tu banda sonora. Las conversaciones en diálogos. Nuestra tecnología para contar historias se convierte en nuestro lenguaje para recordar nuestras vidas. Para entendernos a nosotros mismos. En nuestro marco de referencia para percibir el mundo.
Vemos nuestras vidas en términos de convenciones narrativas. Nuestras sucesiones de matrimonios se convierten en secuelas. Nuestra infancia es nuestra precuela. Nuestros hijos, nuestros spin-offs.
(Chuck Plahniuk, Error Humano)
Se trata de tu vida, pero procesada. Embutida en el molde de un buen guión. Interpretada de acuerdo con el modelo de un éxito de taquilla. No es extraño que hayas empezado a ver cada día en términos de un nuevo episodio de la trama. la música se convierte en tu banda sonora. Las conversaciones en diálogos. Nuestra tecnología para contar historias se convierte en nuestro lenguaje para recordar nuestras vidas. Para entendernos a nosotros mismos. En nuestro marco de referencia para percibir el mundo.
Vemos nuestras vidas en términos de convenciones narrativas. Nuestras sucesiones de matrimonios se convierten en secuelas. Nuestra infancia es nuestra precuela. Nuestros hijos, nuestros spin-offs.
(Chuck Plahniuk, Error Humano)
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2 comments:
Como me pasa con alguna reflexión de Palahniuk en el club de la lucha, también siento identificado con ésta. Esas vidas que vivimos que no son la nuestra, la cultura pop que nos altera la percepción de nuestra propia existencia.
El Other Lives de Bagge, pese a estar para mi gusto por debajo de Apocalipsis Freak, es otra lectura imprescindible. Igual es que con este me ha pasado como con la segunda parte de Odio, la dibujada a color. Echo de menos el glamour post-teen de Seattle. Me cuesta enfrentarme a eso de que cuando llega la treintena nos convertimos en gente frustrada y extraña.
Gran post.
un saludo!
Tenía un panorama de lecturas tan deprimente y desolador (aunque brillante) que la final me he cogido un libro de la biblioteca llamado "delicioso suicidio en grupo" para animarme...
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